El vídeo que hoy presentamos, seguro que hace que una vez entremos en la Catedral, nuestra mirada no se dirija donde habitualmente se suele hacer. Nos olvidaremos por un instante de sus portadas y de sus naves, de sus capillas y sus ventanales góticos, de su ábside y de sus ángeles músicos.
Nuestros ojos, en contra de lo habitual, bajarán su mirada buscando estas misteriosas garras zoomórficas...
Como ya sabéis estos vídeos van acompañados de música, por lo que es aconsejable pausar la música de fondo de la Web a la hora de reproducirlos, tal y como aparece en la imagen, para que de este modo no se mezclen los sonidos.
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